Estos vinos son la expresión de nuestra tierra, del clima, del suelo y del paisaje que lo configura. Nuestros viñedos de Garnacha vieja, con más de 50 años de sabiduría nacen al pie del Sistema Ibérico, en los montes de Paniza a 700 metros de altura, en suelos pedregosos, con buen drenaje y con los más sabios maestros respaldando nuestro sueño para poder armonizar con los manjares de la gastronomía española.
Vino de color cereza intenso y aspecto cristalino. Aromas potentes de frutas negras maduras, también se aprecian notas tostadas y minerales. En boca es potente y carnoso, rico en expresión frutal. Equilibrado. De largo final con una retronasal muy aromática. Temperatura de consumo: Servir a una temperatura de entre 16 y 18ºC. Se recomienda decantar.
Color intenso de cereza negra con reflejos en tonos violetas resultado un vino de atractiva apariencia. La nariz se muestra intensa y madura, con recuerdos a frutos del bosque y frutos rojos. Al paladar, el vino muestra abundante fruta con un equilibrio interesante. Final medio – largo.
Vino blanco brillante de color amarillo pajizo con reflejos acerados y verdosos, de aspecto cristalino. Aroma intenso con un amplio abanico de carácter floral, matices de hierbas aromáticas, cítricos y notas de frutas maduras y exóticas aportadas por su crianza que ofrecen equilibrio y complejidad.
100% Garnacha procedente de viñas de más de 50 años de antigudad. Crianza de 8 meses en barricas de roble americano.
Denominación de origen Cariñena. 50% de Garnacha, 40% de Syrah y 10% de Cabernet Sauvignon.
100% Uvas Garnacha Blanca. Permanece 2 meses en barrica de roble francés.
El diseño de la botella esta sacado de nuestra filosofía de sostenibilidad, para que cada botella pueda ser reutilizada en el futuro por cada cliente en su casa.